¿Cuáles son los diferentes tipos de trasplante de riñón?
Existen dos tipos de donación de riñón: la donación en vida por parte de un familiar cercano o conocido, y la donación de donante fallecido por parte de un fallecido anónimo.
Donación en vida: ¿quién puede donar a quién?
Para una donación en vida, el donante y el receptor deben ser parientes o tener una relación emocional. En Alemania, esto significa: "padres, hijos, hermanos, cónyuges o parejas, prometidos y personas cercanas al donante en una relación personal especial" (artículo 8, apartado 3, de la Ley de Trasplantes de Alemania). Además, la persona debe ser mayor de edad.
La extirpación de un riñón de una persona viva sólo se permite bajo condiciones muy estrictas. En ningún caso se puede ejercer presión moral sobre el donante vivo. El donante también debe gozar de buena salud. Por último, el donante debe recibir información muy detallada de un médico externo al equipo de trasplantes.
Donación en vida: ¿qué es la donación en vida cruzada?
A veces se permite la donación cruzada, o en cadena, de donantes vivos. La donación en cadena entra en juego cuando una donación planificada entre cónyuges o parejas no es posible por razones médicas. Si se encuentran dos parejas en las que el miembro de la pareja X es compatible para el trasplante del paciente de la pareja Y y viceversa, entonces son posibles los trasplantes "cruzados".
En términos sencillos, esto significaría que si el hombre de la pareja X no puede obtener un riñón de su mujer por razones médicas y el mismo problema existe en otra pareja Y, pero las mujeres sanas de ambas parejas podrían donar cada una un riñón al hombre de la otra pareja, entonces se trata de un trasplante cruzado. Sin embargo, un requisito importante es que exista una conexión personal previa entre las parejas.
Donación en vida: ¿cómo funciona la donación de órganos?
Si ambos riñones funcionan igualmente bien, se suele extirpar el riñón izquierdo, es decir, el más largo. El riñón extraído se enjuaga con una solución conservante y se almacena a 4 grados Celsius. En un plazo de 1 a 3 horas, el riñón se implanta al receptor. Si todo transcurre con normalidad, el donante puede abandonar el hospital al cabo de 7-10 días y volver a su vida cotidiana al cabo de 1-3 meses.
Donación en vida: ventajas e inconvenientes
Con este procedimiento se elimina el largo, frustrante e incierto tiempo de espera, lo que supone un gran alivio para el paciente. El donante es una persona conocida, lo que hace que esta situación sea un poco más confidencial. Además, en términos de tiempo puedes planificar mejor. También se elimina el tiempo de transporte. La donación en vida también puede tener lugar antes del inicio del periodo de diálisis. Todas estas son razones por las que la donación en vida suele tener un mayor índice de éxito que la donación postmortem.
A pesar de todas las investigaciones, en algunos casos de donación en vida puede producirse un rechazo. Ambas personas deben ser conscientes de esta posibilidad de antemano. Para el donante, el procedimiento tampoco está exento de riesgos. Al donar un riñón, también se convierte en un paciente renal y tiene que someterse a exámenes periódicos. El riesgo de desarrollar una insuficiencia renal o incluso de necesitar diálisis es relativamente bajo.
¿Cómo funciona una donación postmortem?
Si se recibe un riñón de una persona fallecida, se trata de una donación postmortem. Para obtener este tipo de donación, debes estar inscrito en la lista de trasplantes.
Para una donación postmortem, el proceso típico suele ser el siguiente:
Enfermedad/accidente con daño cerebral grave de una persona,
Determinación de la muerte cerebral irreversible,
Notificación del donante a la Fundación Alemana para el Trasplante de Órganos (DSO) o equivalentes,
Conversación con los familiares,
Exámenes clínicos de la persona fallecida,
Transferencia de datos para la extracción de órganos - Eurotransplant,
Extracción de órganos,
Transporte de los órganos,
Trasplante del órgano.
¿Qué ocurre durante el trasplante?
Desde el momento en que se extraen los órganos, el reloj está en marcha. Esto se debe a que un órgano no puede sobrevivir mucho tiempo fuera de un cuerpo, a pesar de los lavados para conservación y refrigeración. Un riñón es teóricamente transplantable hasta 36 horas después de su extracción. Otros órganos, por cierto, están sometidos a una presión de tiempo mucho mayor: los pulmones y los corazones, por ejemplo, deben trasplantarse en un plazo de 4 a 6 horas, mientras que el hígado tiene normalmente entre 8 y 9 horas.
¿Cuánto tiempo funciona realmente el nuevo riñón?
Hoy en día, las posibilidades de éxito de un riñón trasplantado son muy buenas. Por término medio, un riñón trasplantado sobrevive más de 10 años. Incluso es posible llegar a los 20 años. Si el riñón trasplantado deja de funcionar, será necesaria otra opción de terapia sustitutiva del riñón: la diálisis.