Se acercan las Navidades y te preguntas ¿qué hay que tener en cuenta con la diálisis? ¿Cómo conciliar galletas, turrones, mazapanes y la diálisis? Echemos un vistazo a este aspecto.
El tiempo de Adviento ha comenzado y los mercadillos de Navidad vuelven a abrir sus puertas. El olor de los dulces navideños recién horneados está por todas partes. ¿Cómo conciliar estas delicias con la diálisis? Con algunos consejos y trucos, podrás disfrutar de algunos dulces navideños sin preocuparte demasiado por el potasio, el fósforo y tu salud en general. Veamos paso a paso cómo hacer que los dulces sean compatibles con la diálisis.
Dulces navideños y diálisis: ¿qué ingredientes debo tener en cuenta?
Como ya sabes, es importante que los pacientes en diálisis sigan una dieta lo más baja posible en fósforo y potasio. La razón es que los riñones normalmente filtran ambas sustancias de la sangre. Sin embargo, las personas en diálisis no pueden hacerlo sin ayuda: en este caso, es necesario ayudar a los riñones intentando reducir el potasio y el fósforo en la dieta. Esto también se aplica a los dulces. Además, el azúcar sólo debe consumirse en pequeñas cantidades para proteger al organismo de la diabetes. Esto es particularmente aplicable a las personas que ya la padecen. Limitando el azúcar al cocinar, los niveles de azúcar en sangre pueden mantenerse en un rango saludable a pesar de los tentempiés.
Para ayudarte a empezar cuanto antes, vamos a examinar los ingredientes más importantes para las galletas de Navidad. Por cierto: tanto los otros pacientes en diálisis como el equipo de diálisis estarán encantados de probar tus deliciosas galletas navideñas.
La harina adecuada para la diálisis
La harina es un ingrediente básico importante para tus galletas de Navidad. Asegúrate de que la masa se junte gracias a su cola natural (=gluten). Al añadir un poco de líquido, la harina se convierte en una masa elástica y fácil de moldear. Si miras la sección de harinas del supermercado, verás que hay una gran variedad de tipos. Pero, ¿qué tipos son adecuados para las personas en diálisis?
Básicamente la harina más fina (con un número de tipo bajo, por ejemplo, tipo 405) contiene menos potasio y fósforo que, por ejemplo, la harina integral (tipo 1700). Además, la harina de trigo es especialmente adecuada, ya que contiene menos fósforo y potasio que la harina de espelta, avena, trigo sarraceno o centeno. Dado que la harina de trigo es el tipo de harina más común, probablemente ni siquiera necesite buscar una alternativa para muchas recetas de Adviento. A continuación encontrará un resumen de los valores nutricionales más importantes de los distintos tipos de harina:
- Harina blanca de trigo: 108 mg de fósforo y 145 mg de potasio por 100 g
- Harina de trigo integral: 390 mg de fósforo y 400 mg de potasio por 100 g
- Harina de espelta tipo 630: 116 mg de fósforo y 135 mg de potasio por 100 g
- Harina de centeno tipo 815: 128 mg de fósforo y 170 mg de potasio por 100 g
- Harina de trigo sarraceno: 254 mg de fósforo y 324 mg de potasio por 100 g
** Los valores nutricionales varían según los Países y las diferentes marcas.
Nueces sólo en pequeñas cantidades
Las nueces son auténticas bombas energéticas y contienen grasas, proteínas e hidratos de carbono, así como grandes cantidades de potasio y fósforo. Como también contienen mucha fibra dietética saludable, no hay que eliminar completamente de la dieta los anacardos, las castañas, los cacahuetes, las avellanas, las almendras, las nueces de Brasil y los pistachos, sino consumirlos sólo en pequeñas cantidades. Por lo tanto, cuando cocines, asegúrate de utilizar sólo una pequeña cantidad de frutos secos.
Como pequeño truco, puedes experimentar con las especias: puedes utilizar canela y vainilla sin problemas. Darán a tus galletas un gran sabor incluso sin utilizar frutos secos y perfumarán toda la casa de Navidad, ¡sin azúcar!
Prueba también a utilizar nueces o nueces de Brasil, ya que contienen algo menos de fósforo y potasio que los anacardos, los cacahuetes, las avellanas, las almendras y los pistachos.
Chocolate: revisa las dosis
El chocolate también está presente en muchos dulces navideños. Como ya sabrás, debes consumirlo con moderación. Debido a su alto contenido en fósforo y potasio, no es recomendable para las personas en diálisis. También hay que tener en cuenta el alto contenido en azúcar de muchos tipos de chocolate. Al igual que con los frutos secos, aquí también se pueden utilizar especias. Inténtalo y verás cómo no echas de menos el chocolate.
Recuerda siempre: la dosis es todo. Por tanto, si en un bocadillo hay un poco de chocolate o unos pocos frutos secos, no pasa nada. No hace falta que te comas un plato entero. En general, el chocolate blanco contiene algo menos de potasio y fósforo que el chocolate con leche. Sin embargo, no se puede generalizar, por lo que, en caso de duda, conviene volver a consultar los valores nutricionales exactos de las variedades de chocolate.
Grasas y aceites de alta calidad
Las grasas están en casi todas las recetas. Como potenciador de sabor, hacen que los demás ingredientes destaquen aún más. Asegúrate de utilizar grasas de alta calidad ricas en omega-3. Por ejemplo, el aceite de colza o de oliva. El aceite de colza es especialmente adecuado para repostería, ya que tiene un sabor neutro. El aceite de oliva, en cambio, tiene un fuerte sabor más fuerte.
Azúcar: cuanto menos, mejor
Como las grasas, el azúcar también se utiliza como saborizante en los postres. Afortunadamente, el azúcar comercial suele contener muy poco potasio y fósforo. Sin embargo, el azúcar sólo debe utilizarse en cantidades limitadas porque, como ya se ha mencionado, provoca un aumento de los niveles de azúcar en la sangre. Los niveles excesivamente altos de azúcar en la sangre son a largo plazo dañinos para los vasos sanguíneos y los órganos. Las personas diabéticas, en particular, deben evitar el azúcar en la medida de lo posible.
Pero no te preocupes, muchos productos de pastelería tienen el mismo sabor con un poco menos de azúcar. Como siempre, puedes utilizar como alternativa las deliciosas especias enumeradas anteriormente.
Leche: Utiliza alternativas
La leche aporta proteínas importantes al organismo. Por otro lado, también contiene mucho fósforo. Hay varios trucos que puedes utilizar para sustituir la leche en las recetas sin notar ninguna diferencia en el sabor. Por ejemplo, en lugar de leche, utiliza una mezcla de nata y agua. Por 100 ml de leche, puedes utilizar 35 ml de nata y 65 ml de agua. De este modo, se pueden ahorrar puntos valiosos de fósforo. En lugar de unos 92 mg de fósforo en 100 ml de leche de vaca (3,5 %), la variante nata-agua sólo contiene unos 22 mg.
Otra opción es utilizar alternativas de origen vegetal. La siguiente lista ofrece una visión general de algunas variedades. La leche de almendras, en particular, es utilizada a menudo como sustituto de la leche de vaca por las personas en diálisis debido a sus bajos niveles de fósforo y potasio.
- Leche entera (3,5%): 92 mg de fósforo y 150 mg de potasio por 100 g.
- Leche descremada (1,5%): </95 mg de fósforo y 150 mg de potasio por 100 g
- Bebida de avena (sin azúcar): </41 mg de fósforo y 27 mg de potasio por 100 g
- Bebida de soja (sin edulcorar): </52 mg de fósforo y 118 mg de potasio por 100 g
- Bebida de almendra (sin azúcar): 10 mg de fósforo y 67 mg de potasio por 100 g
** Los valores nutricionales varían según los Países y las diferentes marcas.
Huevos: sólo de forma limitada
Los huevos contienen muchas proteínas animales, que son buenas para el organismo. Los alimentos ricos en proteínas suelen contener también fósforo. Sin embargo, son importantes para cubrir las necesidades diarias de proteínas y así tener suficiente energía. Para ti, esto significa poder utilizar huevos para los dulces, pero intentando ahorrar algunos puntos de fósforo en las recetas con muchos huevos, por ejemplo, evitando pincelar los dulces con yema de huevo.
También puedes sustituir uno o dos huevos por alternativas:
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Para sustituir el huevo se suele utilizar una mezcla de almidón (una cucharada) y agua (tres cucharadas). Este sustituto equivale aproximadamente a un huevo y contiene bastante menos potasio (1 mg) y fósforo (6 mg).
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La compota de manzana también puede utilizarse para algunas recetas. 75 g de compota de manzana equivalen aproximadamente a un huevo y contienen incluso menos potasio (50 mg) y fósforo (5 mg).
Utilizar estas dos alternativas al huevo también tiene otra ventaja práctica: ¡puede incluso probar la masa cruda sin dudarlo!
¡Ya puedes empezar a hornear pasteles de Navidad! Si te faltan ideas, echa un vistazo a la aplicación Mizu. Aquí encontrarás buenas ideas de recetas para diálisis y podrás consultar los valores nutricionales de cada alimento.
